Hidalgou superhero!

Soy el único al que el póster de la película de Hidalgo: La historia jamás contada le recuerda demasiado (y sospechosamente) a esa portada de cómic del Hombre Araña? Ya saben aquella famosa de Spider-Man No More!.

Vamos, hasta Los Simpson la han parodiado :P

Somewhere in California....

Segmento de Coffee & Cigarettes
(por cosas como estas amábamos a Tom Waits)

Lets kick shell!

¿Quién no recuerda con nostalgia el Nintendo? Esa pequeña consola que nos regalaba horas y horas de desperdicio infantil con sus poderosísimos 8 bits de procesamiento.

dulce pasión, suave tormento...

Ayer me sentía retro y me topé por pura casualidad con la lista de los videojuegos más vendidos de toda la historia del NES (Nintendo Entertainment System). Y obviamente Mario y Zelda barrieron con los puestos más altos. Pero me llamó la atención el juego de un estudio independiente que más vendió...

Saben cuál es?

El de las Tortugas Ninja!!!!

Y no hablo de ese rescatable de The Arcade Game... No, no, el más vendido fue aquel primero que salió en los 80s, que era encabronadamente complicado de pasar y que tenía ese molesto sonido bip de reloj despertador cada que estaban por matar a tu personaje.

Su servidor, igual que el 98% de las personas que trataron de jugar esto, nunca pudo llegar demasiado lejos... pero hubo alguien que no sólo logró que el cartucho funcionara luego de soplarle 3 horas, sino que además pudo acabar el juego y subir a youtube cómo mató a los jefes de cada nivel. Curiosos pueden ver el video aquí: http://www.youtube.com/watch?v=vlIonFoYpOI

Morbosos neuróticos, pueden ver cómo el Angry Nintendo Nerd despotrica sobre lo complicado que era el juego y reírse un rato!:

Ah sí, la lista de top selling es:

1. Super Mario Bros. (40.23 million)
2. Super Mario Bros. 3 (18 million)
3. Super Mario Bros. 2 (10 million)
4. The Legend of Zelda (6.51 million)
5. Zelda II: The Adventure of Link (4.38 million)
6. Teenage Mutant Ninja Turtles (4 million)
7. Dragon Warrior III (3.8 million in Japan)
8. Dragon Warrior IV (3.1 million in Japan)
9. Golf (2.46 million in Japan)
10. Dragon Warrior II (2.4 million in Japan)
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Mi amigo Heisenberg

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"En 1927 un matemático formuló el principio de incertidumbre. Venía a decir algo así como que nada se puede predecir con exactitud, siempre queda un margen de incertidumbre en el conocimiento humano, y en ese margen yo siempre pensé que estaba la música, las canciones.

El principio está relacionado con el hecho de que el observador por el mero hecho de ser testigo influye en la realidad que está observando, la altera, introduce una variable de indeterminación."

Por ejemplo, cada canción es diferente simplemente porque tú estás a mi lado…
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(imagen de thecloudsthatmarch, creo)
(Cita de Ismael Serrano y su principio de Incertidumbre)

Para ti...

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I have heard what the talkers were talking, the talk of the
beginning and the end,
but I do not talk of the beginning or the end.

There was never any more inception than there is now,
nor any more youth or age than there is now,
and will never be any more perfection than there is now,
nor any more heaven or hell than there is now.

Urge and urge and urge,
always the procreant urge of the world.
Out of the dimness opposite equals advance, always
substance and increase, always sex,
always a knit of identity, always distinction, always a breed
of life.

To elaborate is no avail, learn'd and unlearn'd feel that it is so...

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Walt Whitman - Leaves of Grass

(song of myself III)

Feliz cumpleaños,

para ti, todas las luces.

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Los mejores títulos de libros (según yo, pues)

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Yo no soy la clase de persona que compra un libro por su portada, (bueno, los discos sí :S), pero efectivamente me cuento entre ese grupo de cuates que compran un libro porque su título le gusta mucho.

Obvio me he llevado un montón de chascos, pero en otros casos me he topado con lecturas hermosas. Y bueno, se me ocurrió hacer esta lista improvisada con algunos de los mejores títulos que recuerdo en mi historia... Con todo y nombre de autor.

Lo raro es vivir - Carmen Martín Gaite

Sputnik, mi amor - Haruki Murakami

The Loneliness of the Long Distance Runner - Alan Sillitoe

Mañana en la batalla piensa en mi - Javier Marías

Historia de una gaviota y del gato que le enseñó a volar - Luis Sepúlveda

París era una fiesta - Ernest Hemingway

Breviario de los vencidos – Emile Cioran

Velocidad de los jardines - Eloy Tizón

Metafísica de los tubos - Amèlie Nothomb

Sauce ciego, mujer dormida - Haruki Murakami

La vuelta al día en ochenta mundos - Julio Cortázar

La eternidad por fin comienza un lunes - Eliseo Alberto

Todos los sueños del mundo - Javier Reverte

El frío modifica la trayectoria de los peces - Pierre Szalowski

Males Raíces - Xavier Velasco

El fondo del cielo - Rodrigo Fresán

Todo está iluminado - Jonathan Safran Foer

¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? - Philip K. Dick

Ruby Tuesday no ha muerto - Mónica Lavin

Tokio ya no nos quiere - Ray Loriga

Las vírgenes suicidas - Jeffrey Eugenides

Moriré sin conocer Disneylandia - Geno Díaz

La puta que leía a Jack Kerouac – Susana Hernández

El hombre que se enamoró de la luna - Tom Spanbauer

¿Tocan el violín los peces de colores? - David Henry Wilson

El mundo según Garp - John Irving

A cada rato lunes - Ulalume González de León

Veo una voz - Oliver Sacks

Gracias por el fuego - Mario Benedetti

La soledad de los números primos - Paolo Giordano

La elegancia del erizo - Muriel Barbery

Dinos cómo sobrevivir a nuestra locura - Kenzaburo Oé
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Las suelas del corredor

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Ayer reflexionaba que para volver a compartirles todo aquí como antes, como era por el 2006, tal vez necesitaba de más ficciones. Lo cual me suena tan paradójico como coherente. Es probable que antes dejaba saber un poquito más, con peras y manzanas, ausente de cualquier guiño y complicidad, vomitaba aquí lo diario. Pero de pronto llegó una fiebre críptica-dylaniana que nos ha dejado marcas, como la piel con varicela. Sólo que éstas las mostramos aun, felices, con orgullo, como heridas de guerra.


Qué difícil es ser fiel a la identidad y la esencia, cuando todos esperan que seas como la imagen que cada uno tiene de ti.

Esa es una frase que sólo podría complacer al que la lee. Tal vez una aspirina para el ego del que no tiene sentidos, mucho menos tangibles.

La gracia es, creo, seguir la melodía en nuestra cabeza. Caminar; componerse andando. Bailar con las consecuencias.
El tiempo es una partitura infinita, y siempre tendremos el privilegio de desafinar en la banda sonora de nuestra propia sinfonía.

Son un accesorio el público y la audiencia.

Las pesadillas, son malas bromas. Cuerdas que revientan nuestra calma, que nos acosan con el eco, que nos amenazan con el duelo de marzo.

Lo cierto es, al final del día, que all things must past.

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Lo cierto es, al final del día, que sigue la noche...

Éste que ves, soy yo.

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Pot kettle black...

Existe esta expresión, que es pérfida, malvada y embustera:

"Es como andar en bicicleta, una vez que lo aprendes jamás lo olvidas"

Algo que incluso de buenas a primeras me suena sensato. Yo creo que aun sé andar en bici, aunque tenga 19 años sin treparme a una. El problema viene cuando nos toca retomar hábitos. Ahí es donde uno dice que "esa frase es del diablo, quiero a mi mamá". Yo lo he comprobado poquito en estos días.

Regresar al salón de clases, por ejemplo, ha sido una experiencia irrepetible, divertida, bella y angustiante. Pero retomar la disciplina de los horarios, las lecturas y los desvelos es un arte realmente complicado de volver a asimilar. Más aun si le agregas tus responsabilidades de adulto de tiempo completo.


Tenemos también esta otra compleja actividad: Asistir a una convención de cómics.

Su servidor es un acérrimo visitante de estos eventos del Jet Set geek, pero en los dos últimos años se ha dedicado solamente a comprar Pan al vapor y Pocky's, y es que no sé, ya comienza a sonarme descabellado gastar cuatro mil pesos en una figura de colección de Macross.

En la última convención mi hermana volteó a ver a un tipo como de treinta y tantos, y me preguntó de qué iba disfrazado...

"Pues de Wolverine!" le dije... a lo que ella comentó "por un momento creí que venía de Pikachu..."

Fue ahí cuando me di cuenta de que tal vez ya había cerrado mi ciclo ahí...

Todas las personas que han estado conmigo (y en especial las que siguen), saben que siempre apesto al principio de los come backs.

Mi amigo Juanelo se fue a Madrid, y durante todo el tiempo previo no tuve las bolas para despedirme formalmente de él. Como niño chiquito, no quiero que se vaya. Y hasta lo conjugo aquí, en mi geografía.

Otros come backs no dan con las palabras y cuestan mucho trabajo. Y nos roban sonrisas y dan vida a esta alma.
Hoy al menos aquí regresamos.
Y siempre habrá alguna melodía para encontrarnos....