JUANDERFUL! Entre estocadas, pachecadas y festejadas: Johnnybuddy cumple años (22 de Octubre)

Un día Groovy!

Johnnybuddy cumplía años e iba echar la casa (el negocio de refas) por ventana, entre él y el raro Adauco financiaron el arranque de la pachanga, poniendo el lugar, la rockola de crédito ilimitado (yuju!) y las sustancias embriagantes, bueno la energía eléctrica terminaron poniéndola los del taller de al lado.

Adauco y Johnnybuddy versión powerpuff girls

Llegué temprano al barrio de la fiesta, demasiado temprano. Daba la casualidad que ese mismo día era el cumpleaños de mi madre y yo lo había olvidado por completo (vamos la culpa es de ella, no dibujó un flyer como Juan para recordármelo), así que mis abuelos para celebrar a mi madre nos invitaron a un viaje con todos los gastos pagados al Sirloin Stockade (Nunca había ido).

Este fue el flyer

Fue, raro… es un comedor industrial con un ambiente pseudo-campestre familiar, los menús y opciones de bufete se me hicieron muy enredados, por suerte mi padrino ordenó todo, y por mayor suerte a final de cuentas no era mala la comida! Aunque me quedé con ganas de probar el Roast Beef, y la barra de postres, que Ivette me la recomendó pero ya que no me cabía un solo bocado en el estomago.

Del Sirloin nos fuimos para el Agua Azul a comprarle un arreglo floral de alcatraces y gerberas a mi madre (una vieja tradición de mi viejo).

Al llegar ahí vi una fila enorme de gente ansiosa por entrar al Agua Azul, al fin Guadalajara se había reconvertido en una ciudad cultural? No, Good Charlotte venía a la ciudad y ese día era su concierto. Asco.

Pasé cerca de donde tenía la idea que sería la pachanga pero faltaban horas para que empezara así que me regresé a casa, me puse un saco y me fui para la fiesta. Por desgracia el flyer que hizo Juan estaba medio sui-generis, donde decía que dieras vuelta a la derecha en realidad tenías que darla a la izquierda, detallitos de esos que solo descubre una mente sagaz, o un guey extraviado que es guiado en la dirección indicada cuando le llama al Johnnybuddy por el celular.

Cuando llegué como que apenas todo iba comenzando, pero el Tribi como buen artillero ya estaba presente al pie del cañón. El menú de la velada: Churritos de esos, cervezas, refrescos, churritos de aquellos y agualoca.

Estuvo muy bien, vi a cuates que tenía un buen que no veía, otros que si, pero estaban bien orates aquella ocasión (edá Pollo?) y ahora andaban sobrios (bueno al menos hasta que me fui).

Secuestré por un ratillo la super rockola y me puse a programar música a diestra y siniestra, para deleitar al público con U2 (las más rockeras), The Strokes, Blur, Oasis, The Offspring y Alejandro Fernández (traía mood de nube viajera, ¿Qué puedo decir?).

baile y baile... ellos.

Luego llegó el Formas, un chico raro, no sé si se comporte así todo el tiempo o si ya andaba briago, pero me puso a programar las rolas que le gustaban a él. Asi terminaron sonando a todo volumen para deleite del respetable “La Pucha Asesina” y “Que Chingue a su Madre la Puta de Sara”.

Luego me reuní un rato con el Gallo, el Pollo (sin parentesco), Alan, el Fubu, el Tribi y Johnnybuddy, que no duró ni un minuto ahí, porque andaba ocupadón de anfitrión, saltando de grupito en grupito. Salía a tomar aire cuando me mandaron un mensaje al celular: Se había armado la cena familiar improvisada para seguir festejando a mi madre.

Los demás cuates estaban muy metidos en sus ondas, así que lo tomé como la señal para irme. Fue un momento cuasibreve pero me la pasé muy bien, no hubiera faltado a la fiesta de un buen amigo como el JohnnyBuddy que incluso tuvo el detallazo de darme ride a la calzada, abandonando su propia fiesta. Gracias Cuate!

Ah sí, Adauco también andaba por ahí....

Él no fue a la fiesta, pero hubiera estado genial que sí.

ESE DÍA APRENDÍ QUE: Johnnybuddy siempre trae las baterías bajas, (del Ipod, de su cámara digital y en una de esas hasta de la troca). Pero siempre trae buena vibra.

Un abrazo amigo.