Hace poquito me entró la nostalgia por esas viejas caricaturas que procuraba de niño. Donde en mi caso, al igual que en el de cómo un millón de gueyes que vivieron su infancia a finales de la década de los 90, Saint Seiya (o Los Caballeros del Zodiaco) se ocupó de enajenarnos. alucinarnos y freírnos las neuronas durante años!
Todos estábamos dispuestos a chutarnos ese insufrible intro cantado por españolotes. Con tal de tener nuestra sana y divertida media hora de madrazos sin sentido. Ignorábamos a nuestra mami que no paraba de contarnos la noticia esa del niño que luego de decir “Dame tu fuerza Pegaso!!!” tomó un martillo y le reventó el craneo a su hermanito. ¿Qué más daba? Uno sólo quería ver con qué salvajada saldrían en el capitulo de la semana, que luego se volvió diario para nuestro desenfreno.
Si bien en ese entonces la violencia de Saint Seiya nos parecía retacada de cubetazos de sangre, ahora vemos las repeticiones y la verdad no era para tanto, más si la comparas con animaciones recientes, estas hacen ver a Hyoga con su polvo de diamantes tan peligroso como Elmo armado con un plumero.
Todos estábamos dispuestos a chutarnos ese insufrible intro cantado por españolotes. Con tal de tener nuestra sana y divertida media hora de madrazos sin sentido. Ignorábamos a nuestra mami que no paraba de contarnos la noticia esa del niño que luego de decir “Dame tu fuerza Pegaso!!!” tomó un martillo y le reventó el craneo a su hermanito. ¿Qué más daba? Uno sólo quería ver con qué salvajada saldrían en el capitulo de la semana, que luego se volvió diario para nuestro desenfreno.
Si bien en ese entonces la violencia de Saint Seiya nos parecía retacada de cubetazos de sangre, ahora vemos las repeticiones y la verdad no era para tanto, más si la comparas con animaciones recientes, estas hacen ver a Hyoga con su polvo de diamantes tan peligroso como Elmo armado con un plumero.
Cuando se estrenó en los cines la primera película, la histeria colectiva se apoderó de Guadalajara. No sé cómo fuera en otras ciudades pero en este rancho nomás la proyectaban un solo cine. El Reforma. Que eso sí, estaba muy mono, con fachada de castillo de Disney, palomitas con refill gratis y todo el show.
La película sobra decir que me TRAUMÓ.
Le lavé el cerebro a mis primas, fans de Disney, para que organizaramos una excursión patrocinada por las tias para ver la de Los Caballeros del Zodiaco Contraatacan. Y bueno, ellas que no soportaban ver al papá de Simba como tapete de cabaña, casi se guacareaban viendo las patadas, reventadas de ocico y escupidas de dientes de la trama. Pero weeeee.... hasta la fecha esa cinta es la onda.
La trama era excelente, el ritmo pausado y luego desesperado. Los personajes geniales, Atlas de Karina Keel era tan odioso como admirable. Ese poder con el que literalmente reventaba a los caballeros desde dentro, rostizándolos de paso, rockeaba con todo.
No me creen o quieren recordarlo? Vean nomás la pelea entre Pegaso y Atlas, mi escena favorita:
La música que apenas ahora comprendo por qué me gustaba tanto: Para esta cinta tuvieron el acierto de mezclar música de orquesta con electrica. Entonces escuchas marchas de guerra al más puro fusil de Wagner con acompañamientos de guitarra electrica y distorsiones.
La fucking onda, y para aquellos que anden de pellejo nostalgico como su servidor... ahí les dejo el soundtrack de esta película.
Soundtrack: Saint Seiya - Shinku No Shonen Densetsu. Descargar aquí
1 comentario:
particularmente, fue la que tuvo una estetica mas cuidad y un mejor ritmo... despues me di cuenta de que fue la unica hecha para ser presentada en cines en su tierra natal... me ha tocado.. el nervio nostalgico..
pd las nuevas animaciones a mi parecer les falta ese saborcito a animacion de los 80s, demasiado color digital y efecto computarizado...
saludos de nuevo
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