La Maldición de Xavier Velasco.

A Xavier Velasco lo conozco desde antes de que le publicaran libros.

Fue por casualidad, hojeando una revista de música y otra de cine, que me topé con un par de columnas mensuales que me dejaron enganchado: "Sciencia Filoxa" y "Soundtracks para la isla desierta".

Aun recuerdo que mi primer pensamiento justo después de leerlo fue: "Maldita sea! Ojalá pudiera escribir tan bien como este tipo!". Pronto se convirtió en el único motivo por el que compraba Switch y Cine Premiere.

Luego vino su sitio web. www.fullmoontonic.com Ahí podías leer su ensayo sobre Caifanes y su primera novela/e-book. Cecilia. Me había vuelto adicto. Todo lo que encontraba de él lo devoraba. Simplemente su estilo me parecía infinito.

Luego vino Luna Llena en las Rocas, una lectura de una noche, lo empecé por curiosidad y no pude detenerme hasta que amaneció al día siguiente. Fue la primera vez.
Luego el Materialismo Histérico. Muy disfrutable y diverso, un mero campo de entramiento para el siguiente gran paso.

Diablo Guardián, el Premio Alfaguara de Novela 2003. Recibí la noticia con alegría y orgullo. Xavier se lo merecía con todas las de la ley, me alegró la idea de que al fin muchas más personas lo conocieran. De que ocupara el lugar que le correspondía.

Fue genial ir a verlo a la FIL, Arturo Pérez-Reverte lo entrevistó en un foro, la mayoría de los asistentes fue a ver a Reverte y todos terminaron enganchados con Velasco. Y todo era bueno.

Luego, Alfaguara publicó El Materialismo Histérico, después Luna llena en las rocas... Osea todas sus obras de nuevo, a la inversa.

Me he topado muchas veces con personas que opinan que Diablo Guardián es muy buena, pero que sus libros posteriores son muy flojos, han perdido el toque o que ya de plano apestan.

Y lo comprendo. ¿Cómo no van a tener esa impresión si han leido de su obra más compleja a los ensayos menores? El premio Alfaguara catapultó a la fama a Xavier, pero también afectó en su imagen con las publicaciones de material reciclado. Y ese parece que será por un rato su estigma.
Ahora bien, por fin luego de tantos años Xavier publica un nuevo libro. Inédito y reciente: Este que ves.

Fiel a su espíritu el muchacho no sólo parte de un punto complicado sino que dobla la apuesta. Una novela narrada por un niño, con tintes descaradamente autobiográficos, donde incluso el protagonista se llama Xavier. Osea que no es pero sí es...

El resultado es un libro insolente y simpático, ingenuo y malicioso, exagerado y verosimil.... Como un niño...

No puedo compararlo con Diablo Guardían, porque simplemente no tienen nada que ver más allá del nombre del autor. En otras palabras:

Xavier has vuelto...

Gracias. Hacías falta... =-)