La siguiente nota fue escrita por mua para el periódico de este agosto y creo que encierra bien mi sentir respecto a esta belleza...
En la Ciudad del Pecado se respira sangre, plomo y vicio. En la Ciudad del Pecado viven prostitutas con hielo en las venas y el corazón de oro. En la Ciudad del pecado viven día a día los peregrinos de la muerte. Detectives, asesinos, delincuentes. En la Ciudad del Pecado se engendra la violencia sobre montañas de cadaveres. Sin embargo, en medio de toda la locura urbana, lo que hace latir la ciudad es la amistad, el honor, el amor y el idealismo, todo llevado hasta sus últimas y fatales consecuencias.
El Dios que rige a este lugar es solo uno. Su nombre: Frank Miller. El genio responsable de haber redifinido el concepto de la palabra "Comic" con un par de obras maestras, que hoy por hoy, ya ocupan un lugar en la historia de la cultura popular norteaméricana. Hablamos de Batman Year One y Batman: Dark Knight Returns, novelas gráficas que marcaron el destino de la percepción del hombre murcielago, historias que ya adquirieron el estatus de obras de culto y que han sido analisadas, igual que elogiadas por distinguidas personalidades literarias, cinematográficas e intelectuales. Desde el escritor Stephen King (El Resplandor) hasta el director Darren Aronofsky (Réquiem Por Un Sueño). Todos concuerdan, Frank Miller es el amo.
Publicada originalmente en 1991, Sin City (La Ciudad del Pecado) es una novela gráfica (comic con calidad literaria) que revolucionó las tendencias del genero, dibujada sin color, explotando al maximo las cualidades contrastantes-minimalistas del blanco y negro. Se creía una obra imposible de adaptar al cine, el mismo Miller había rechazado en incontables ocasiones ceder los derechos para la realización de un filme, hasta que Robert Rodr刕uez le mostró la idea que tenía en mente y lo convenció
El resultado, la película, no es más que la consecuencia de una coalisión extraña. Lo que sucede cuando juntas al gurú de las historietas con el director más barato, vistoso y Tex-Mex de Hollywood. Sin City es literalmente un comic llevado al cine.
Filmada en Blanco y negro de alto contraste, plasmando lo minimo posible el color, recurriendo en un 100% al uso de la pantalla verde, la pelíula logra el milagro de trasladar la atmosfera oscura de la historieta, revive el cine negro, abandonado desde L.A. Confidential (1997) y de paso provoca el nacimiento de un nuevo estilo de cine.
Frank Miller aparece en los creditos como Co-director y por si fuera poco, cabe señallar una curiosa anécdota: Quentin Tarantino (Pulp Fiction) fue invitado por Rodríguez para dirigir una secuencia de la película, cobrando por sus servicios la misera cantidad de un dólar (que envidia). En pocas palabras. Sin City va que vuela para convertirse en clásico.
El Dios que rige a este lugar es solo uno. Su nombre: Frank Miller. El genio responsable de haber redifinido el concepto de la palabra "Comic" con un par de obras maestras, que hoy por hoy, ya ocupan un lugar en la historia de la cultura popular norteaméricana. Hablamos de Batman Year One y Batman: Dark Knight Returns, novelas gráficas que marcaron el destino de la percepción del hombre murcielago, historias que ya adquirieron el estatus de obras de culto y que han sido analisadas, igual que elogiadas por distinguidas personalidades literarias, cinematográficas e intelectuales. Desde el escritor Stephen King (El Resplandor) hasta el director Darren Aronofsky (Réquiem Por Un Sueño). Todos concuerdan, Frank Miller es el amo.
Publicada originalmente en 1991, Sin City (La Ciudad del Pecado) es una novela gráfica (comic con calidad literaria) que revolucionó las tendencias del genero, dibujada sin color, explotando al maximo las cualidades contrastantes-minimalistas del blanco y negro. Se creía una obra imposible de adaptar al cine, el mismo Miller había rechazado en incontables ocasiones ceder los derechos para la realización de un filme, hasta que Robert Rodr刕uez le mostró la idea que tenía en mente y lo convenció
El resultado, la película, no es más que la consecuencia de una coalisión extraña. Lo que sucede cuando juntas al gurú de las historietas con el director más barato, vistoso y Tex-Mex de Hollywood. Sin City es literalmente un comic llevado al cine.
Filmada en Blanco y negro de alto contraste, plasmando lo minimo posible el color, recurriendo en un 100% al uso de la pantalla verde, la pelíula logra el milagro de trasladar la atmosfera oscura de la historieta, revive el cine negro, abandonado desde L.A. Confidential (1997) y de paso provoca el nacimiento de un nuevo estilo de cine.
Frank Miller aparece en los creditos como Co-director y por si fuera poco, cabe señallar una curiosa anécdota: Quentin Tarantino (Pulp Fiction) fue invitado por Rodríguez para dirigir una secuencia de la película, cobrando por sus servicios la misera cantidad de un dólar (que envidia). En pocas palabras. Sin City va que vuela para convertirse en clásico.
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